Salvador no es sanchista, Salvador es susanista. Por ese motivo, Salvador de la Encina no encabezará las listas del PSOE por Cádiz en las generales. Salvador lleva viviendo de la política 24 años. ¡Qué levante la mano quien sea capaz de decir algo que haya hecho por la provincia que representó durante las legislaturas: VI, VII, VIII, IX, X, XI y XII!
Eso sí, cuando gobernaba un partido que no era el suyo, como es un gran defensor del Campo de Gibraltar, se lanzaba a encabezar manifestaciones y ofrecía muchas ruedas de prensa para reivindicar y defender la línea ferroviaria de Algeciras-Bobadilla, el Puerto de Algeciras, el medio ambiente, etc. Luego, una vez que el PSOE llegaba al gobierno, se ponía de perfil. Tiene mérito. Tanto mérito que ha sido capaz de empatizar con el electorado durante 24 años. Eso no lo hace cualquiera.
Es evidente que tantos años trabajando por su provincia significa desgaste. Las cervicales las tiene que tener regulá de andar haciendo reverencias por el Congreso de los Diputados y en los actos del partido. Gracias a ello, le han otorgado un premio por su arrastrada trayectoria, una especie de jubilación dorada. Le han concedido la presidencia de los Puertos del Estado. Eso significa, según los Presupuestos Generales, un sueldo base de 13.582 euros, un complemento de destino de 14.304 euros, un complemento específico de 24.746 euros y dos pagas extra de 1.970 euros cada una. Esto suma 56.572 euros anuales para el ejercicio de este cargo.
Queda claro que los servicios prestados, el ejercicio del cargo sin rechistar y mostrando gran lealtad y vasallaje a los intereses del partido, se premia en el PSOE. Esos son los méritos. Las instituciones al servicio del partido para contentar a los suyos, premiar a los sumisos, “atraer” votantes, proteger a la famiglia…
Y es que señalan los psicólogos que la familia es un agente socializador imprescindible para nuestro desarrollo. De hecho, los padres no son la única figura familiar importante, los hermanos también suelen estar ahí en los buenos y los malos momentos. En este caso, se desconoce si Salvador ha estado esta semana ahí para su hermano, en los malos momentos. Si bien es cierto que la familia es importante, la famiglia lo es más y al pequeño David lo ha ignorado hasta la presidenta de Diputación. Al fin y al cabo, 24 años de una vida bien pagada es más significativo que un apellido.
Al final van a tener razón los psicólogos. En ocasiones, la relación fraternal puede volverse tóxica, sobre todo si se hacen las cosas –públicamente- mal. Y David lo ha hecho mal. Con un sueldo de 47.933,56 euros por trabajar en la administración paralela creada por el PSOE, se atrevió a solicitar seguir en nómina pero sin ir a la oficina para centrarse en su objetivo de ganar las elecciones de 2015. A día de hoy, no ha dimitido, también muy característico de la famiglia.
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