lunes, 22 de junio de 2009

¿Deporte?

El debate deportivo del mes lo centra el fichaje de Ronaldo, el portugués, por una millonada que roza la inmoralidad. Digo bien, roza. Las opiniones son diversas, que si en tiempos de crisis no es justo que Florentino haga tamaña demostración de poderío económico, que tan sólo se trata de dar patadas a un balón, que el Madrid es una empresa, que Florentino es el salvador del Real Madrid, Ronaldo vende muchas camisetas… Todos tienen razón, los que están a favor y los que están en contra, tan solo porque en ese debate cualquiera de las posturas expuestas se rebate, continuamente, con el argumento opuesto.
Todo este planteamiento moriría con un argumento más sencillo. ¿Acaso estamos hablando de deporte? No, no es deporte. Estamos hablando de espectáculo, de negocio, de marketing. Cuando digo que roza la inmoralidad, lo hago porque nadie se plantea comparar una Sociedad Anónima Deportiva con una empresa cualquiera que invierta una millonada en abrir una fábrica o en comprar determinada computadora. Los clubes profesionales no son clubes, son empresas. Los jugadores de fútbol que salen en la tele no son deportistas, son profesionales. Por ese motivo, no llega a ser una inmoralidad invertir 94 millones de euros en contratar a un operario modelo especializado en meter goles. Así de sencillo.
La inmoralidad viene posteriormente cuando pretenden hacer ver al hincha que el club es de todos. ¡Qué no es un club, es una empresa! La inmoralidad viene cuando la población se cree, realmente, la gran mentira, esto es que tienen derechos sobre esas sociedades anónimas deportivas, únicamente, por el hecho de llevar una bufanda con los colores del equipo. La inmoralidad viene cuando el dinero público se utiliza para apoyar a esas empresas de espectáculo deportivo y, en tiempos de dificultad económica, como el actual, suprimen o reducen las ayudas y subvenciones a aquellos que realmente son clubes deportivos o entidades no lucrativas que dedican su tiempo y su propio dinero a que los más pequeños y no tan pequeños practiquen su deporte favorito.
Media etiqueta, Noticias Locales. 20 de Junio de 2009

1 comentario:

Juan Manuel Juanmusgo Zúñiga Arias dijo...

Totalmente de acuerdo.... Un abuso contra el deporte, otra forma más de provocar compulsividad en los futuros deportistas... Así como ya te enseñan a querer un super coche, te enseñan también - si sos deportista - a querer valer tanto cómo él....

Un saludo cordial