viernes, 17 de julio de 2009

La verdadera crisis

Desde las últimas elecciones generales, con aquellos famosos debates entre socialistas y populares que diferenciaban entre desaceleración y crisis económica, todo lo acaparan las cuestiones económicas y la cada vez más acentuada crisis.
De todas formas, todo apunta a que las secuelas que dejará en esta ocasión son más profundas y puede que la metástasis haya recalado en instituciones democráticas actuales. Ha vuelto a ocurrir como en 1929, a otro nivel, pero ha vuelto a ocurrir. La especulación en aquellos momentos reventó el mercado y se propagó por todos los sectores económicos y sociales, en esta ocasión la especulación vuelve a reventarlo todo. La solución socialista ha sido, a modo de Keynes, recurrir a la receta, ya inventada, de la Coca Cola. Aclaro, el “Estado de Bienestar” interviene subsidiando actividades correctivas de las desigualdades sociales y trata de resolver los problemas graves dentro de la estructura del Estado Liberal. Para el “Estado de Bienestar” es necesario intervenir, porque si se deja a la sociedad librada a su suerte, se cae en una irracionalidad donde los que más tienen tienden a incentivar aún más las diferencias sociales y económicas. Se creó el subsidio por desempleo, por ejemplo, que por un lado permitía a los más desfavorecidos cubrir sus necesidades más básicas y, por otro lado, se mantenía la actividad económica, ya que esas capas sociales podían continuar consumiendo.
Las instituciones a las que citaba en líneas precedentes son los ayuntamientos, que son la base del sistema democrático. La política local es vital y día a día, apreciamos la crisis tan acuciante que sufre. No quedan líderes, no hay carisma, la corrupción está presente y además no existe la vocación servicial. Los cargos los ocupan personas sin formación que berrean mostrando su ineptitud con expresiones del tipo “yo no tengo que saber nada de economía, pero soy político”. Simplemente, patético. Apreciamos problemas donde los partidos en la oposición exigen una serie de cuestiones a los que gobiernan, y en cambio, donde gobiernan no las llevan a cabo. Absolutamente, incongruente, pero cierto.
Da igual el color político, en todos los ayuntamientos es el mismo problema, solo hay que abrir un periódico cualquiera para apreciarlo, ninguno tiene dinero para fomentar actividades económicas, para potenciar la cultura y el deporte, o simplemente pagar a los proveedores. Todos recurrieron al suelo y a los pelotazos urbanísticos, y ahora llegan los jueces, y entre caso y caso prescrito, algún corrupto cae en manos de la justicia. Amén.
La justificación, había que buscar dinero como fuera ya que la medida de Aznar, quitándole a los municipios la gestión del Impuesto de Actividades Económicas (IAE), hizo estragos. Además como de imaginación no andamos sobrados, lo fácil era copiar al de al lado, y construir. ¡Con dos cojones!
Media Etiqueta, Noticias Locales, 18 de Julio de 2009

3 comentarios:

Anónimo dijo...

enhorabuena por tu artículo, estoy completamente de acuerdo contigo al decir que nuestros políticos muestran en muchos casos graves lagunas en su formación (veáse por ejemplo Zapatero o mejor aún "Ansar"hablando en inglés). En ese mismo orden de cosas, me parece interesante el tema de la incongruencia de los políticos; ¿Cómo se explica el hecho de que a la juventud se nos pida cada vez más en cuanto a nuestra formación (Cosa que desgraciadamente en España no es garantía de éxito laboral) mientras que muchos de ellos dan muestras de su ignorancia académica en multitud de asuntos (cosa que a veces es justificada con el pretexto de que son gente llana y humilde, como si tuviese algo que ver)?

un saludo.
Clint Eastwood de la Rosa juaneldelvapor@hotmail.com

Juan Manuel Juanmusgo Zúñiga Arias dijo...

Bueno eso es algo global. En Costa Rica ocurrre de forma similar.

Del texto me deja reflexionando esta parte:

"Se creó el subsidio por desempleo, por ejemplo, que por un lado permitía a los más desfavorecidos cubrir sus necesidades más básicas y, por otro lado, se mantenía la actividad económica, ya que esas capas sociales podían continuar consumiendo."
Estos son parches que permiten mantener a flote el sistema económico: remiendos. Ponen un parche de algunos billones de dólares por aquí, otra ayuda trillonaria para los países pobres por allá, y que bueno las megaempresas sigan vendiendo...

Tema aparte, la ausencia de líderes que se indica, parece un producto del mismo sistema. Siento que lo que existe una cadena de personas influyentes(adiestradas) que se encargan de supervisar que el mundo siga creciendo su consumo y pues, escogiendo los mejores parches, para garantizarlo. A veces tiendo a creer que incluso los "quejosos" son un parte bien hilada del sistema.

Un cambio radical sólo es posible si el mundo le hecha una mirada a la solidaridad y eso implica que cada uno de nosotros trate de influir positivamente en las personas que tiene más cerca. Yo al menos he perdido completamente la fe en todos aquellos que se denominan políticos, prefiero a los humanos que trabajan y han visto que lo material importa poco.
Esos que pueden partir un pedazo de pan en dos para llevar las hambres a medias. De ellos quiero aprender :).

Gran artículo Joaquín! Gracias por compartirlo.

Miguel Quintero dijo...

Amigo, saludos!!! pues si, yo creo abiertamente en la intervención del estado, lo que si debo decir es que me revienta tanta pasividad. Tiene que darse la participación ciudadana y tambien, con urgencia, lìderes avocados, abnegados, a la gente, es decir verdaderos lideres, en otras palabras: REVOLUCIÓN. Hay que evolucionar y revolucionar, hay que pensar en algo y ver la forma de llegar a la gente, para que se despabile, hacer efectiva la participacion ciudadana y enfrentar y confrontar a tanto politico de porqueria que se dicen ser lideres...creo que no hay otro camino. Como decimos aca: tener malicia indigena. Y no dejar que nos den atolillo con el dedo. Saludos camarada desde el otro lado del atlántico.